La esperanza
Hay situaciones que nos hacen sentir desesperanzados, como la muerte de un ser querido, una separación permanente, la pérdida de nuestro trabajo, malos resultados en una prueba o un diagnóstico negativo en la salud.
Todo ello nos hace sentir que no tenemos control o que no contamos con las herramientas necesarias para hacerles frente, o que nuestra actitud es pesimista ante este tipo de acontecimientos.
Sin embargo, la moneda siempre tiene un lado positivo, y es aquí donde surge la esperanza: la que nos anima a seguir luchando contra la adversidad y a no darnos por vencidos; la que nos permite mantenernos de pie emocionalmente, cuando las circunstancias podrían derrumbarnos.
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