Sexualidad y diabetes
Estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) indican que en el mundo hay 347 millones de personas que viven con diabetes y según proyecciones internacionales, para el 2030 esta cifra podría duplicarse. Por otra parte, de acuerdo con la Federación Internacional de Diabetes, China, India, Estados Unidos, Brasil, Rusia y México son en ese orden, los países con mayor número de personas que viven con diabetes.
Esta enfermedad crónica se está convirtiendo rápidamente en la epidemia del siglo XXI y en un reto de la salud global. Entre las complicaciones que se tienen por esta enfermedad está la sexualidad, afectando por igual la vida de hombres y mujeres. Sin embargo, pocas veces se habla con la pareja porque no se le toma importancia, ya que se prioriza la medicación y no se habla sobre la vida sexual.
¿Qué tan importante también es atender este aspecto de la vida?
Disfunciones sexuales y Diabetes
Por Francisco Delfín Lara, Terapeuta sexual
La diabetes es una enfermedad, un padecimiento sistémico, esto quiere decir que se va a manifestar en muchas partes del organismo. Afecta con el flujo sanguíneo y con el sistema nervioso, con lo cual no va a llegar la orden para que las arterias vacíen su sangre a esos lugares y en el caso de que lo haga, llegará poca sangre.
Disfunción sexual se refiere a la alteración o la falla en una de las partes de los componentes de la respuesta sexual, para que se hable de disfunción, tiene que ser algo que se repite y que causa molestia a la persona o a su pareja.
Mujeres y diabetes
Las mujeres que viven con diabetes por lo regular suelen ser las últimas en darse cuenta que tienen alguna disfunción sexual porque normalizan la falta de deseo y si su pareja es la que tiene diabetes, entonces, ellas se dedican al cuidado, por lo que hablar de relaciones sexuales ni pensarlo, lo primero es atender la salud.
En el caso de que haya intimidad sexual, las mujeres con diabetes se enfrentan no solo a la manifestación de su disfunción sexual sino también a intentar complacer a su pareja a pesar de que ellas pudieran sentir dolor. Ante este panorama, el silencio es su acompañante y lo hacen parte de su vida.
La diabetes puede tener repercusiones en la autoestima e imagen de las mujeres que viven con esta enfermedad, dando lugar a sentimientos de inseguridad y a la sensación de haber perdido la capacidad de seducir, lo que conlleva a que dejen buscar cualquier relación amorosa que implique intimidad.
Por otra parte, cabe señalar que el diagnóstico de diabetes en una mujer después de varios años de vivir en pareja suele representar una mayor angustia por miedo a fallar o a no responder como antes. Además, es común el temor al fracaso y a que la relación se rompa y lo que puede suceder es que haya un rechazo a la actividad sexual.
La molécula que revoluciona la sexualidad
Libro de David Barrios Martínez, Médico, Sexólogo y Psicoterapeuta
Los varones que presentan disfunción eréctil causada por la diabetes, deben tener claro que el tratamiento para esta disfunción va más allá del uso de un medicamento, es algo que debe tratarse integralmente, desde cómo está la relación con la pareja hasta la forma de cómo reacciona nuestro cuerpo ante una enfermedad como esta.
David Barrios Martínez, Médico y sexólogo en su libro “La molécula que revoluciona la sexualidad”, habla sobre la famosa pastilla azul, sus mitos y realidades y explica que la mecanización de los vínculos eróticos a menudo se produce cuando se combinan dos factores: centrar el erotismo en los órganos sexuales y en la penetración, y confiarse en la ley del mínimo esfuerzo.
Dicha mecanización se manifiesta cuando el arte pasional y creativo del contacto de los cuerpos es sustituido por la toma de una pastilla que servirá para el cumplimiento de un solo objetivo, el coito por sí mismo, como una posibilidad de compartir el momento erótico.
Comments are closed.