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La familia y la nueva familia

Se dice que la distancia entre la nueva familia y los padres es necesaria para mantener relaciones felices y armoniosas. Sí, eso es desde lo ideal, desde lo que sería mejor, pero ¿qué pasa si no se tienen recursos para vivir en un espacio propio?

En promedio las rentas están en unos 8,000 pesos y eso dependiendo del lugar en el que se quiera vivir, pero ¿qué hay de las condiciones en que se establecen?

Por otra parte, quienes no viven con los suegros ¿realmente se salvan de tener desencuentros con ellos? La presencia y la opinión de los padres tiene un alcance importante, hay muchas parejas que prefieren vivir cerca porque muchos los ayudan a cuidar a los hijos y otros prefieren no alejarse por si llegan a necesitar cualquier cosa, desde cuidados por una enfermedad hasta visitas cotidianas.

¿Será que al final siempre terminamos por depender de nuestros padres? ¿tú, qué opinas?

La suegra

Las suegras son ese personaje del que se hace el chiste sobre una mujer con la que la pareja se enfrenta. ¿Qué tan real será el estereotipo que tenemos sobre la madre de nuestra pareja?, ¿qué tan cercana será con las ideas que se promueven desde la educación familiar, la educación escolar o la que aprendemos en nuestro entorno?

Con la finalidad de reconocer a esta figura de la familia política, en Argentina se designó el 26 de octubre como el día de la suegra y México tomó también este día para visibilizar el papel de las madres de las parejas.

Habría que cuestionarnos si esta visibilización de las mujeres como madres de nuestra pareja no cae también en el estereotipo de cuidadoras y preservadoras de la familia, ¿tendrían que ser ellas las encargadas de esto?, ¿existe un día del suegro en el que solo hablen del papel de los padres de la pareja?

Tipos de apego

John Bowlby desarrolló la teoría del apego entre 1969 y 1980 y sigue vigente porque estableció que la relación que existe entre las vivencias y relaciones emocionales durante la infancia y el comportamiento son fundamentales para todos los vínculos que creamos en nuestra vida.

Después, en la década de los 80 Cindy Hazan y Phillip Shaver ampliaron esta teoría a las relaciones amorosas y pudieron identificar cuatro estilos de apego:

  • Apego seguro, es cuando las personas tienen una visión positiva de sí mismo y de sus relaciones, por lo que se sienten muy seguros.
  • Apego preocupado ansioso, se refiere a que seduce constantemente la aprobación de los demás. Son emotivos, impulsivos, desconfiados y tienden a depender de la otra persona, tienen una visión poco entusiasta de ellos mismos y de sus relaciones.
  • Apego evitativo independiente, hablamos de aquéllas personas que suelen aislarse porque no se sienten cómodos en la intimida, por lo que son muy independientes. Así evitan las relaciones cercanas, suelen suprimir sus sentimientos.
  • Apego desorganizado, lo viven aquéllos que tienen sentimientos contradictorios en sus relaciones interpersonales, es decir, pueden sentirse tanto deseosos como incómodos en la intimidad emocional, se ven a sí mismo con poco valor y desconfían de los demás.

Quizá reconocer que tipo de apego tenemos, nos sirva para identificar por qué nos relacionamos como lo hacemos con nuestra pareja.

Casarse con la familia

Dicen que no te casas con una persona sino con su familia y ya sea que vivan en la misma casa o no, la relación que establecemos con los padres de nuestra pareja puede afectar o enriquecer nuestra dinámica familiar.

El reto es que cada conflicto que se pueda suscitar lo podamos ver como una oportunidad de crecimiento en pareja o ¿tú qué opinas?

La familia política

Virginia Satir, escritora y psicoterapeuta estadounidense conocida especialmente por su enfoque de terapia familiar afirma “Los sentimientos de valor solo pueden florecer en un ambiente donde se aprecien las diferencias individuales, se toleren los errores, donde la comunicación sea abierta y las reglas sean flexibles”, es decir, el tipo de ambiente que se encuentra en una familia cariñosa. 

Al respecto, cabe mencionar que la familia cariñosa puede ser también nuestra familia política, pero ¿acaso hemos pensado qué tan dispuestos estamos a mostrarnos, a compartirnos y a ser parte de la familia de nuestra pareja?

Agradecimiento

Cuando expresamos aprecio y reconocimiento hacia alguien que nos ayudó, estamos siendo agradecidos por la generosidad del otro y no es necesario quedar en deuda. Muchas veces, a la otra persona le significa más una muestra de afecto.

La gratitud es un valor que modifica la relación que tenemos con el otro porque se convierte en una guía que da determinada orientación a la conducta y a la vida de cada individuo y de cada grupo social.

En este sentido, en la vida cotidiana la gratitud en las relaciones de pareja, en ocasiones queda en el olvido, perdiendo de vista que el agradecimiento hacia el otro por lo vivido puede fortalecer la relación.

La gratitud no es solo dar gracias, se trata de reconocer lo que el otro está dispuesto o hace para consolidar la relación amorosa. Tú, ¿eres agradecido con tu pareja?, ¿cómo se lo demuestras?

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